«A nivel corporativo, de empresa y de economía, la Torre es el símbolo de Bilbao»

Elena Lázaro, directora de la Torre Iberdrola, ha dedicado más de 15 años de su vida profesional al nacimiento y evolución de este icónico edificio. «Es parte de mi vida», asegura.

Por Laura A. Izaguirre

Cuando Elena Lázaro dice que la Torre Iberdrola es parte de su vida, es bastante literal. Y no solo porque sea directora de ‘el faro de Bizkaia’ desde 2019 sino porque, además, durante su construcción fue jefa de la oficina técnica y, posteriormente, gerente de la Torre. «Empecé en 2006 con un trabajo muy técnico de coordinación de todos los equipos técnicos de proyecto y obra, luego pasé a ser gerente del equipo de Property Management y ahora soy la directora. En cada etapa he tenido diferentes funciones, muy técnicas, más operativas y ahora más estratégicas y de comercialización», repasa Lázaro, arquitecta de formación.

¿Qué balance hace de esta década?
Para mí la Torre es parte de mi vida, son muchísimos años. Es un proyecto en el que ha sido una suerte participar, en primer lugar a el nivel técnico porque teníamos los mejores medios y los mejores equipos. Y en segundo lugar, a nivel de explotación, porque tenemos los mejores clientes de Bilbao y el edificio también es el mejor técnicamente. Y estar siempre trabajando rodeado de los mejores es una suerte.

¿Cómo fueron los inicios de la Torre y cómo ha evolucionado?
La puesta en marcha no fue fácil, llevó mucho tiempo. El edificio tiene muchísimos sistemas técnicos de electrónica que hicieron que tardáramos bastante tiempo en que todo fluyese como debía. Casi se puede decir que estuvimos dos años de remate de obra porque el inmueble estaba ocupado y realmente había cosas que no funcionaban perfectas, así que esos inicios fueron duros. Luego las cosas han ido más rodadas y una vez que la parte técnica entró, por decirlo de alguna manera, en velocidad de crucero, nos dedicamos más a los temas relacionados con la fidelización de la comunidad, es decir, a generar un ambiente de prestación de servicios superiores dentro de la Torre como el restaurante, el préstamo de paraguas (que es de lo más exitoso), los eventos… Y todos los años seguimos incorporando una novedad porque las necesidades de la sociedad también son muy cambiantes.

¿Qué es lo más difícil de dirigir un edificio de estas características?
La parte más compleja es la técnica porque son muchos sistemas, todo está interrelacionado y necesitamos técnicos muy especialistas.

¿Cuál ha sido el momento más complicado que recuerda a lo largo de 10 años de andadura?
Es muy reciente. El martes 1 de febrero de 2022. Desgraciadamente hubo una fuga de agua que afectó a la instalación eléctrica (obligó a desalojar el edificio y a mandar a casa a todos los empleados durante una jornada) y seguimos sufriendo consecuencias de esa avería (esta entrevista fue realizada el 9 de febrero) porque el agua está ahí, aún no se ha secado, y están fallando cosas. (Ese mismo día varias plantas tuvieron que volver a ser desalojadas).

¿Y el mejor momento?
Me acuerdo de dos buenos. Cuando cumplimos cinco años, se organizó aquí una cena del Colegio de Arquitectos de Bizkaia a la que acudió César Pelli (arquitecto diseñador de la Torre Iberdrola), y fue como volver a juntarnos la gente que habíamos estado en obra. Otro momento especial que recuerdo está relacionado con uno de los ‘afterworks’ que realizábamos con los inquilinos, en concreto es el del 5 de marzo de 2020 –me acuerdo porque nueve días más tarde se acabó el mundo–, con la semifinal de la Copa del Rey entre Athletic y Granada. Lo recuerdo con muchísimo cariño.

La Torre Iberdrola se ha convertido en uno de los iconos de la ciudad…
Obviamente el Guggenheim es el referente de la transformación de Bilbao, pero después, a nivel de reconocimiento y de visibilidad, que es obvia, estaría la Torre. Estamos en un orgulloso segundo puesto. También es verdad que Bilbao tiene emblemas muy característicos en diferentes ámbitos: a nivel deportivo está San Mamés, a nivel de movilidad tenemos Metro Bilbao, si hablamos de espectáculos está Euskalduna… Tenemos unos símbolos muy asociados a usos, y en ese sentido, a nivel corporativo, de empresa y de economía, está
la Torre.

¿Cómo le gustaría que le recordaran tras su paso por la dirección de la Torre Iberdrola?
Por el sentimiento de comunidad que se ha creado entre clientes y trabajadores. Que todo el que haya pasado por alguna de las empresas que trabajan aquí se vaya a lo largo de su carrera profesional con un buen recuerdo del tiempo que pasó en la Torre.

Si quieres leer el suplemento especial que hemos preparado con motivo del 10º Aniversario de la Torre Iberdrola, puedes verlo aquí: Suplemento 10º Aniversario Torre Iberdrola

Entradas recientes