Los idiomas menos habituales se abren paso entre el alumnado vasco
El estudio de árabe y lenguas orientales como chino o japonés ha aumentado notablemente su demanda en los últimos años
Por Leire Fernández
El chino y el árabe son dos de los idiomas más hablados del mundo, lo que los hace muy interesantes tanto para quienes les guste viajar como para aquellos que se dediquen a profesiones en las que las relaciones internacionales estén presentes. La demanda de estas lenguas, así como de otras menos tradicionales como japonés o incluso coreano, es cada vez mayor, como pueden comprobar los centros que se encargan de impartirlas. «El chino sigue avanzando con seguridad, nítidamente enfocado a lo profesional. El japonés, no siendo todavía el de mayor alumnado es el de mayor crecimiento caracterizándose por un profundo interés cultural. Y el coreano, se está iniciando con mucha fuerza en el panorama idiomático como sinónimo de modernidad», detalla Megan Fowler, directora de los Institutos Chino y Japonés de Bilbao.
Además, quienes se acercan a estos idiomas, no encuentran solo una lengua, también toda una cultura. «Cada vez hay más personas que descubren la belleza de la lengua árabe y la importancia de la misma y se interesan en aprender este bello idioma y su cultura», comentan desde el Centro Vascoárabe. «El japonés ha irrumpido con mucha fuerza con el interés puesto en conocer, no solo el idioma, también su cultura; algo que estamos viviendo en directo. El coreano se apoya en los dos aspectos principales de cultura y economía frente a sus competidores orientales», añade Fowler.
En cuanto a los motivos que llevan a los alumnos a interesarse por estas lenguas son varios, aunque el profesional es uno de los más importantes. «El enorme desarrollo de China hace que, profesionalmente, sea uno de los idiomas más importantes a tener en cuenta para el futuro laboral», especifica la responsable del Instituto Chino. «Los idiomas orientales se hablan en países con un desarrollo empresarial espectacular por lo que, creo, que son del máximo interés. Es importante la inversión de la industria vasca en China con más de 22 plantas industriales y unas 19 en Japón. Hay solicitud de directivos que hablen el chino y japonés. Es cierto que existe una comunicación en inglés, pero hay algunas empresas que han ganado proyectos gracias al apoyo de nuestro equipo como intérpretes en reuniones de gestión y negociación», reconoce.
Más fáciles de lo que se cree
Algo similar a lo que ocurre con los estudiantes de árabe. «Es la sexta lengua más hablada del mundo y una de las lenguas de las Naciones Unidas», dicen desde el centro Vascoárabe. «Entre nuestros alumnos hay trabajadores sociales humanitarios, cooperantes y voluntarios, educadores, profesionales relacionados con el Tercer Sector y la Intervención Social en contacto con población inmigrante o refugiada procedente de Oriente Próximo o del Magreb. Ejecutivos en comercio internacional, grafólogos, informáticos, diseñadores gráficos, estudiantes universitarios, profesores, médicos. Personas con inquietudes culturales y espirituales, un alumnado muy variado», afirman.
En lo referente a la dificultad que pueden presentar estas lenguas, ambos coinciden en que es más fácil de lo que la gente se imagina. «Algunos consideran este idioma como un galimatías por la simple y llana razón de que difiere de los idiomas indo-europeos. Como consecuencia, aprender árabe rápido es considerado algo difícil (casi imposible). Pero esto son clichés. Los métodos científicos elaborados por especialistas en idiomas muestran que aprender árabe es un proceso que no se diferencia en nada del aprendizaje de otros idiomas europeos», explican desde el centro de enseñanza. «Aunque siempre se dice que en los idiomas orientales la dificultad es la escritura, yo diría que, en chino, la fonética es clave», asegura Megan Fowler.
Aprendizajes completos
A la hora de aprender estos idiomas en ambos centros resaltan la necesidad de unir cultura e idioma. «Es muy, muy importante el mostrar los aspectos culturales para una buena asimilación», incide Fowler. «Nuestro sistema de doble profesorado + talleres + material específico resulta muy efectivo. Por supuesto, lo complementamos en verano con campamentos y estancias educativas en China y Japón, respectivamente, para una inmersión y aprendizaje totales».
En el caso del centro Vascoárabe, «la metodología está basada en la utilización combinada de diferentes métodos. El primero de todo es aprender a leer y escribir en árabe, y eso te abre a un mundo fascinante. Después empezaremos a estudiar fundamentos lingüísticos y gramáticos de árabe y aprenderlo con la lista básica de las 500 palabras más utilizadas del idioma. Todos los idiomas hablados contienen una ‘lista básica’ de palabras más utilizadas en las conversaciones cotidianas. Este concepto de ‘lista básica’ es la lista de todas las palabras que todo estudiante debe aprender a hablar en el idioma de su elección», detallan.
Y ¿cuánto se puede tardar en aprender estos idiomas? «Depende del nivel al que quiere llegar el alumno. Por ejemplo, para leer, escribir y defenderse en árabe pueden hacerlo en quizás 80 horas lectivas. Además, la tecnología se ha convertido en una importante herramienta en el manejo del idioma árabe de forma autónoma». «Hemos tenido alumnos que han dominado el chino en 3 años, en tiempo récord, pero generalmente es una carrera de larga distancia como casi cualquier otro idioma», concluye Fowler.